¨No viajamos para escapar de la vida, sino para que la vida escape de nosotros¨ este Autor anónimo nos anima a tomar decisiones de cambio, que debemos despertar nuestro cuerpo y nuestra mente para preparar las maletas, la mochila o cualquier otro bolso y experimentar la libertad de irse a otra parte con el objetivo de escapar de la rutina, del estrés y de la ansiedad. Podemos ir bien lejos o aquí cerca, salir de viaje ya trae consigo una sensación de bienestar emocional.
Recorrer el mundo, conocer otros países o diferentes culturas enriquece nuestras emociones y nos permite descubrir que hay otros puntos de vista diferentes a los nuestros, incluso nos ayuda a conectarnos con nuestro interior y a obtener una perspectiva más clara sobre quiénes somos. Este autoconocimiento es mucho más poderoso cuando nos atrevemos a viajar solos, pues dejamos atrás nuestros miedos y nuestras inseguridades.
Todos coinciden en que se viven experiencias únicas en entornos diferentes, no solo mejoran nuestra costumbres, sino que también nos ayudan a mejorar como personas, nos proporciona placer ya que todos nuestros sentidos absorben experiencias que después se convertirán en alimento para el alma. A nuestro regreso todo estará mejor de lo que lo dejamos porque traemos cambios y motivaciones que evolucionan con nosotros como un engranaje perfecto. ¨La gente no hace viajes, son los viajes los que hacen a la gente¨. John Steinbeck.